mundo humano

viernes, 23 de abril de 2010 Anhelar un mundo humano, y ya estar en camino Siento con entusiasmo esta posibilidad de recomenzar otra manera de vivir. Lo que ayuda a la decisión es un mar de fondo, que se ha ido formando a través de hechos aislados que comienzan a entramarse, imágenes que nos sorprenden, libros que leemos. La gente que frecuentamos, un sentimiento de patria cuando estamos en el exilio. Algo diferente que se valora, que nos asombra y que sentimos como una utopía que se nos acercara. El cambio se da cuando nuestra mirada no se separa de ella. No podemos olvidar que en estos viejos tiempos, ya gastados en sus valores, hay quienes en nada creen, pero también hay multitudes de seres humanos que trabajan y siguen en la espera, como centinelas. En la historia los cortes no son tajantes, y ya en las postrimerías del Impero romano, sus ciudadanos frecuentaban a sus vecinos bárbaros, y es seguro que tendría amores con ellos; así ya están entre nosotros los habitantes de otra manera de vivir. Hoy como entonces, hay multitudes de personas que no pertenecen a esta civilización posmoderna, muchas están trágicamente excluidas y otras muchas parecen aún formar parte de las instituciones sociales, pero su alma está preñada de otros valores. El pasaje es un paso atrás para que una nueva sensación del universo vaya tomando lugar, del mismo modo que en el campo se levantan los rastrojos para que la tierra desnuda pueda recibir la nueva siembra. ¡Si nos enamoráramos de este pasaje! ¡Si en vez de alimentar los caldos de la desesperación y de la angustia, nos volcáramos apasionados, revelando un entusiasmo por lo nuevo que exprese la confianza que el hombre puede tener en la vida misma, todo lo contrario de la indiferencia! Dejar de amurallarnos, anhelar un mundo humano y ya estar en camino. Ernesto Sábato, La resistencia Publicado por Marcelo L. Cambronero en 17:36 Etiquetas: Humanidad 0 comentarios: Publicar un comentario en la entrada Entrada más reciente Entrada antigua Página principal Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom) Marcelo L. Cambronero Ver todo mi perfil El Sujeto Ausente Cuando te veo tan silenciosa en el llano desierto, cuyos confines lindan con el cielo, me digo pensativo: ¿Por qué el aire infinito y el profundo firmamento sin fin? ¿Qué significa esta gran soledad? ¿Y yo, qué soy yo? El sujeto presente Archivo del blog ► 2012 (5) ► abril (1) ¿Qué democracia real ya? ► marzo (1) Arlés del Río: arte y poder ► febrero (1) La religión del interés ► enero (2) ETA, nacionalismo e Iglesia José Mateos, el mejor poeta contemporáneo ► 2011 (8) ► octubre (1) La aburrida educación del moralismo ► mayo (3) El nuevo mundo ¿Qué democracia real ya? El poder que ahoga ► abril (1) Cada cual con su quimera ► marzo (1) LAS RAZONES DEL PODER ► enero (2) Una explicación por favor La batalla que es el hombre ▼ 2010 (21) ► diciembre (3) Padres e hijos Ingrid Betancourt: 'I felt less than an animal' Queridos yihadistas ► octubre (3) Los mineros de Chile y la vida cotidiana ¿De dónde aprenden los psicólogos? Atardecer en Sierra Nevada ► septiembre (2) Dios y el estado De aquellos polvos, estos lodos ► agosto (1) Queda desesperación ► junio (3) La mentalidad dominante, también en la Iglesia Freya Stark Capitalismo y deseo ► mayo (4) La Balada del Poder El niño yuntero ¿Quién es el filósofo? ¿escritor y/o maestro? Mario Benedetti: esa batalla ▼ abril (4) Una suma de alteraciones insignificantes con la qu... Anhelar un mundo humano, y ya estar en camino El valor de la libertad Un juicio nuevo sobre la pedofilia ► marzo (1) Charles Peguy: poeta de la encarnación ► 2009 (70) ► noviembre (1) Autoridad de los maestros y corrupción de los polí... ► octubre (4) Cómo devolver la autoridad a los profesores ¿Qué es ser ortodoxo, en la Iglesia? ¿Hay alguien que ame la vida y desee días felices?... El dúo de la tos ► agosto (2) ¿Qué es el arte? Libertad y mentalidad dominante ► julio (4) Aborto: traición al feminismo Manifiesto contra el aborto Zelaya, o los tiranillos de siempre Los elementos que componen la vida ► junio (5) Savater o los ecos del pensamiento único Descanso eterno Clericalismo anticlerical y otras especies Libertad política La vida que está en ti ► mayo (7) ► abril (8) ► marzo (7) ► febrero (10) ► enero (22) ► 2008 (17) ► diciembre (17) nuestro mundo copyright autor do texto